Cada día hay más personas concienciadas con la importancia que tiene para nuestra salud, la práctica del deporte. Esta importancia es extensible a nuestros perros. Nuestras mascotas, al igual que nosotros, necesitan hacer ejercicio para mantener un buen estado de salud.
En muchas ocasiones, nos gustaría pasar más tiempo con nuestras mascotas, pero el ritmo diario, no nos lo permite. Bien, en este artículo os vamos a hablar de cómo podéis disfrutar de vuestros animales, mientras practicáis deporte, y así poder estrechar lazos entre ambos.
Ahora está de moda la práctica del running y, que mejor opción, que salir a correr con nuestro perro. Para ello, el uso de una correa adecuada será muy importante (busca un longitud que impida que tropecéis y que permita que tu mascota pueda correr libremente).
Junto con los estiramientos, también, podéis hacer ejercicios de motivación que ayudaran a tu mascota a trabajar las articulaciones de forma eficaz (hazle subir escaleras y utiliza otro tipo de obstáculos con diferentes niveles).
Seguro, que has oído hablar de la práctica llamada canicross, esta modalidad deportiva hace unos diez años que se implantó en España, y combina el running con superficies de tierra o nieve.
Para la práctica del canicross con nuestro perro deberemos colocarnos un cinturón y dejar una línea de tiro que vaya hasta un arnés que le pondremos a el. Aquí, en España lo más común es realizar este ejercicio sobre una superficie de tierra, aunque existe la modalidad sobre nieve.
Para acabar, otra alternativa, que te planteamos para poder practicar deporte, mientras disfrutas de tu mascota, son los estiramientos. Estos ejercicios los puedes compaginar con el runnig, y son muy beneficiosos para tu mascota. A partir de los diez años, las patas de tu perro pueden sufrir artritis, y el estiramiento le ayudará a que sus músculos se mantengan elásticos y fuertes. Hacer que tu perro ejercite su musculatura mandibular, también, es importante, y, para ello solo necesitareis tener a mano algún tipo de palo, con el que no pueda hacerse daño, pero que sea más duro que el pienso que come.