Con la llegada del invierno y la bajada de los termómetros es importante que sepamos cómo proteger a nuestras mascotas del frío. Por este motivo, os dejamos unos cuantos consejos que os pueden ayudar.
Tu mascota agradecerá dormir calentito. Si, el animal duerme en el exterior, durante la época más fría del año, te aconsejamos que duerma dentro de casa, especialmente, si tu mascota es mayor. El frío puede hacer que se desarrollen enfermedades respiratorias complicadas de tratar.
El pelaje, su abrigo de piel. Los perros cambian su pelaje dos veces al año (invierno y verano). Especialmente, en invierno será importante que te encargues de ayudar a tu mascota a que mude el pelo, lo más rápidamente posible. Nosotros te aconsejamos que lo cepilles de forma regular para retirar todo el pelo sobrante, al menos tres veces por semana.
A falta de abrigo de piel propio, ponle ropa. Hay perros que por su raza no tienen pelo o lo tienen muy corto. No tengáis reparos en vestirlos. Cuando os hablamos de vestir a la mascota, no os estamos proponiendo disfrazarla, sino usar capas, abrigos y otro tipo de prendas que existen hoy en día y que contribuirán a que vuestra mascota no pase frío. Recordad que la ropa del animal debe mantenerse limpia.
"Al agua patos". En invierno, si tienes que bañar a tu mascota, te aconsejamos que lo hagas dentro de casa, con agua caliente y evitando las corrientes de aire. Los cambios bruscos de temperatura y las corrientes de aire son nuestros principales enemigos en invierno y también los de nuestros amigos peludos.
Atención a los animales mayores. En invierno las articulaciones de tus mascotas se resienten más que en otras épocas del año. Por eso te aconsejamos que si tienes mascotas mayores estés atento a sus movimientos, y si observas algún tipo de problema o notas algo extraño, contacta con tu veterinario.
Buena alimentación. Ante el frío, una buena alimentación es básica para que tu mascota cuente con la energía suficiente para generar calor. Para no enfriarse deberá moverse, y para moverse necesita estar muy bien alimentado.
Las patas de tu mascota son muy vulnerables. Cuando hace mucho frío las patas de los animales corren el riesgo de dañarse e incluso pueden llegar a congelarse. Te aconsejamos que revises de manera seguida sus extremidades, y sobre todo, los cojinetes. En caso que notes alguna anomalía contacta rápidamente con el veterinario.
No olvides el calendario de vacunación. Es muy importante que tu mascota este debidamente vacunada. Hay enfermedades infecciosas que aparecen especialmente en invierno, en especial las que afectan al aparato respiratorio.
No lo mediques sin saber. Si crees que tu perro ha enfermado por el frío u observas moquillo en la nariz, lagañas o tos, habla con tu veterinario.
En definitiva, el frío afecta a nuestras mascotas como puede afectarnos a nosotros, los humanos. Si aplicamos la lógica para tratar a los animales, como haríamos con nosotros mismos, en la época invernal y llevamos un calendario de vacunación adecuado a la mascota, no tenemos porqué preocuparnos.